Apareciste de repente...
Como el alba en el horizonte... eterna.
Y te convertiste en mi sol y luna,
de las estrellas de nuestra noche
hiciste tus pupilas...
y me miraste...
mágica, extensa, abrazándome...
y me hiciste tuyo.
Apareciste de repente...
y tus manos tranquilizaron mi piel,
y tu voz mis sentimientos...
y tu alma se hizo conquistadora de mí.
Apareciste sin esperarte...
y te hiciste necesaria,
y te volviste abrazo...
Te volviste nosotros.
Y yo fui viento...
y fui mar y la tierra de tu andar,
todos llevaban a ti... a nosotros.
Apareciste de repente...
Con la premura de las estaciones,
llegó la nota final de tu ausencia, y te fuiste...
como un instante perdido en el tiempo,
un eco lejano de aquel nosotros.
Maravillosoi poema, que recitado queda sublime, magistral. ¡¡¡Felicidades David!!!
ResponderEliminarUn cálido abrazo
Gracias Pili Ruiz, me llena de alegra ver tu comentario en mi blog... me enorgullece que lo sientas así... Gracias por comentar. Un cálido abrazo para ti también.
Eliminarprecioso si aveces sin avisar viene con fuerza bellas letras amigo , un abrazo desde mi brillo del mar y feliz finde David
ResponderEliminarGracias por comentar Beatriz Martín, es todo un placer tenerte en mi blog... gracias por seguirme.
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